Todo ello iría a manos de Newcoval y por tanto dejaría de ser patrimonio del club, a cambio de que Bankia financiara las obras del futuro estadio y construyera una nueva ciudad deportiva, pero no en la partida de Porchinos como estaba firmado, sino en un suelo propiedad del banco en la localidad de Náquera. Liga de Campeones. A ello se le suma no haber dado una oportunidad y haber dejado escapar a una joven promesa de la cantera como era Isco, y un carácter de escasa autocrítica por parte del entrenador.